Mundo BANI vs VUCA
“Quien sobrevive no es el más fuerte, ni el más inteligente, sino el que mejor se adapta al cambio”.
Charles Darwin
Nos habíamos acostumbrado dentro del ambiente empresarial, como una manera de “entender” los cambios frecuentes y confusos, a usar la expresión VUCA. Con todo lo acontecido en el año 2020 y su impacto en nuestros entornos, este acrónimo (que nace a finales de los años 80 sobre finales de la Guerra Fría, hace ya más de 40 años), comenzó a tener sabor a poco, a quedarse corto y de la mano del pensador y futurólogo Jamais Cascio llego BANI, un nuevo acrónimo que describe mejor el nuevo escenario y recoge la inestabilidad y situaciones caóticas, sorprendentes y desorientadoras en las que muchas veces nos vemos inmiscuidos.
Vamos a ver a qué se refiere cada uno de ellos y cómo nos puede afectar.
¿A qué nos referimos con VUCA?
Este concepto nos habla acerca del ambiente, del contexto, del mundo que se vivía y lo describe en torno a cuatro dimensiones:
Volatility (Volatilidad): ritmo rápido de cambio y demandas cambiantes.
Uncertainty (Incertidumbre): no se puede predecir el futuro.
Complexity (Complejidad): dificultad en entender y manejar el contexto.
Ambiguity (Ambigüedad): falta de claridad sobre cómo interpretar la información.
¿Qué significan las siglas de BANI?
Britle, se podría traducir como “quebradizo o frágil”. El exceso de confianza produce fragilidad. Es una de las “ilusiones” más frecuentes, pensar en la solidez de un sistema o una empresa hasta cuando dejan de serlo. La tecnología y la energía, son ejemplos de sistemas robustos pero que cuando fallan, crean una cadena de caos y pérdida incalculable. Es el tipo de fortaleza ilusoria que tienen determinados sistemas aparentemente sólidos pero que se pueden desmoronar con facilidad, por ejemplo, al adaptarse ante la fragilidad las empresas pueden mantenerse como líder o vislumbrar un caso de éxito, como lo supieron afrontar muy bien Netflix, pedidosya, Rappi, Glovo y otros, en 2020 al crear alternativas cuando se necesitaban, aprovecharon la fragilidad de sus clientes y les dieron una opción Indoor. Por su parte, los cinemas y restaurantes se vieron frágiles ante un escenario desconocido en la historia reciente, ante esta adversidad.
Ansious, la ansiedad que provocan los cambios continuos. Una ansiedad que puede dar lugar a pasividad cuando se siente que los cambios son avalancha y que no hay forma de influir en ellos. La ansiedad, es ese miedo e incertidumbre a niveles altos que provocan los cambios continuos y la imposibilidad de influir sobre ellos. Muchas veces la ansiedad que generan esos cambios, no permite que se vean las oportunidades.
Nonlinear, hay una gran distancia entre la escala a la que ocurren las cosas y la escala a la que las percibimos, la relación causa y efecto que normalmente se acostumbraba, ahora se mide a gran escala. La consciencia y una visión sistémica pueden ayudar a entender las situaciones y adaptarnos a hacer pequeños cambios. Por otra parte, entender que las acciones que hace un año se tomaban, hoy pueden ser insuficientes, por ello las competencias profesionales están en un constante cambio.
Incomprehensible, hechos que se escapan del nivel de entendimiento consecuencia del exceso de información ya que una cantidad enorme de datos con la interpretación incorrecta, puede generar confusión y acciones erróneas.
Se puede pensar que estos modelos aplican a las grandes organizaciones y que adaptarse a los cambios implica grandes inversiones o toma de decisiones complejas, pero no es así. Ante la adversidad, los cambios y motivaciones, son los líderes quienes primero abrazan estos contextos para bajar en línea a sus colaboradores sin importar el número de empleados que hagan parte de la organización, dicho esto podemos concluir que lo que demandan de las empresas es la necesidad de profesionales resilientes, adaptables al cambio y con liderazgo, que permanezcan en pie ante la adversidad.